LA NAÚSEA LITERARIA
“El mundo era terrible, cruel, despiadado, ominoso como un mal sueño. No era un buen lugar para vivir. Los libros eran el único sitio en el que había hallado compasión, consuelo, felicidad… y amor. Los libros amaban a todo aquel que los abría, dispensaban recogimiento y amistad sin exigir nada a cambio, nunca se marchaban, nunca, aunque los tratasen mal. Amor, verdad, belleza, sabiduría y consuelo ante la muerte.
[…] ¿Hay algo más hermoso en el mundo que las letras? Símbolos mágicos, voces de muertos, sillares de mundos maravillosos mejores que éstos, que dispensan consuelo, disipan la soledad, guardan los secretos, proclaman la verdad…”
(Cornelia Funke)